miércoles, 21 de abril de 2010

De una vez por todas.



La droga. Esa gran enemiga de la humanidad. Por culpa de la droga miles de personas mueren en nuestro mundo a la cada día.




La droga es una de las mejores cosas que el hombre ha descubierto, me refiero a la droga como medio medicinal, gracias a ella vive mucha gente. Pero, como siempre, el hombre no sabe aprovechar y respetar lo que tiene, a si que lo usa mal. Y ese es el caso de la droga, y no me refiero solo a lo típico: jeringuillas, pastilla y hierbas, sino que me refiero, también, a la nicotina, al alcohol y demás drogas permitidas. No digo que no bebamos, pero si que lo hagamos con moderación. Y de la nicotina mejor no hablo, porque es un tema muy delicado e importante que prefiero hablarlo en otra entrada.

¿Qué está pasando actualmente? Pues fácil, el mundo de la droga es cada vez más grande y más poderoso, y por lo tanto más adictivo. Cada vez son más los jóvenes irresponsables que se meten en el mundo de la droga sin conocer, o aún así, sus consecuencias. Y lo hacen, esto es lo más fuerte, sin importarles sus seres queridos, ya que la droga no sólo hace daño al individuo que las toma, sino que también a su familia, amigos, conocidos. Estas personas son egoístas, deberían pensar en sus seres queridos.

¿Qué debemos hacer? Pues evitar esa venta ilegal, enseñar a los jóvenes, yo entre ellos, las consecuencias, y sobre todo darnos cuenta de que la droga... simplemente... ¡hace daño!

Tenemos que darnos cuenta de que cuando un humano esta bajo el vicio de una droga, legal o ilegal, no es humano. El humano se caracteriza por su libertad, y cuando tienes un vicio que no te deja ser libre, no eres humano, ya que... ¡no tienes libertad! Aprendamos a decir que NO de una vez por todas, por el bien de todos. ¡Qué fantástico sería un mundo sin vicios, sin drogas! ¿Verdad?

lunes, 12 de abril de 2010

¡HAGAMONOS UN FAVOR!


La verdad. Una palabra sencilla de seis letras, pero seguramente uno de los términos más difíciles que existan. ¿Qué es? ¿Se ha de decir siempre? ¿Quién miente y quién no?

Desde pequeños nos enseñan ha decir la verdad: "Siempre hay que decir la verdad niños" nos repetían nuestros padres una y otra vez. Cuando crecemos nos damos cuenta de que incluso los adultos mienten, suelen mentir más que los niños la verdad, así que me pregunto si la verdad hay que decirla obligatoriamente, y también me pregunto qué es eso de la sinceridad.

Desde mi punto de vista siempre habría que decir la verdad, aunque la mayoría de las veces duela. Porque díganme, ¿qué clase de vida llevaríamos si evitásemos oír o decir la verdad? ¡No me lo quiero ni imaginar! Aunque, y esto es importante, decir la verdad no significa que siempre hay que decir lo primero que se te venga a la cabeza, eso causa grandes problemas.

La sinceridad es tan importante en nuestras vidas hasta el punto de que es uno de los pilares del matrimonio, de la amistad, del noviazgo, del amor que existe entre la familia, etc.

La sinceridad es el valor que hay que tener para decir la verdad aunque cueste, y también es la humildad de reconocerla. Una persona que haga estas dos cosas se puede decir que es una total y auténtica persona sincera. La sinceridad es una virtud hay que respetar y cuidar.

Así que señores y señoras, ¿por qué no nos hacemos un favor entre todos y respetamos más este tema de la verdad? Animo a todos, empezando por mí, a decir la verdad. Hagámoslo y ayudemos a crear un mundo mejor, en cierto manera.