domingo, 10 de abril de 2011


Happy moments...

moments of laughter...

photographed moments...

moments to remember...

miércoles, 16 de junio de 2010

Dificultades.











Una vez que os he dejado claro que es nuestra responsabilidad poner en marcha las medidas necesarias para formar tus propios valores, ahora me veo en la obligación, de que, como todo en esta vida, no es fácil.

En esta vida te encontrarás con numerosas dificultades para poner en práctica tus valores o simplemente para tenerlos. ¿Qué dificultades? Pues se me ocurren unas cuantas así sin pensar mucho, por ejemplo la vergüenza, la cobardía, la gente falsa, la manipulación, la falta de educación, la irresponsabilidad...

Explicaré algunas de esas dificultades. Por ejemplo, la cobardía. Hay gente con valores, los mismos siempre y en todas las situaciones, pero hay gente que no se atreven a poner en práctica o simplemente a decir cuales son sus valores. Que verdad más triste, ¿verdad?

Otra dificultad, y muy utilizada en esta sociedad, consiste en la manipulación. Manipulación a través de palabras, actos...

En realidad estas dificultades no son reales, son complejidades que tenemos, miren por ejemplo la vergüenza, en realidad cuando la gente pasa la vergüenza, se dan cuenta de que estaban acomplejados, eran complejos que ellos mismos se habían creado. Nosotros mismos engrandecemos esas dificultades, caemos en las redes. Muchos caen, pero por favor, no lo hagas tú también. Cuantas menos personas lo hagan, mejor será este mundo donde vivimos.

Es responsabilidad tuya.

Los seres humanos somos libres. Eso está claro. Y si somos libres para poder hacer lo que queramos, quiere decir que tenemos la posibilidad de formar y poner en práctica nuestros propios valores. Tenemos esa maravillosa responsabilidad. ¿Maravillosa? Sí. Si la responsabilidad de poner las medidas necesarias para formar nuestros valores es responsabilidad nuestra, que lo es, significa que vivimos en libertad.

Decir la verdad, esfuerzo, la auto superación, el buen estudio, la motivación, la responsabilidad, la justicia...En esta vida hay muchos valores, y para ponerlos en marcha, de una correcta manera, es necesario ser responsables y tener las ideas bien claras.

Sin duda, formar mis valores es responsabilidad mía, y ponerlos en marcha, también. Pero hay gente a la que puedes pedir consejo o tomar como ejemplo, hay gente que te puede ayudar, y ahí es donde entran a formar parte en tu vida personas como los padres, profesores, etc.

Tener tus propios valores es bastante importante en esta vida, y que sean buenos, lo es más. Otra cosa muy importante es ponerlos en práctica, hazme un favor y hazlo, no seas uno de esos fantasmas mentirosos y falsos que viven una vida falsa y que vagan por la vida sin saber que hacer, quienes son o adonde ir, no te lo aconsejo.

lunes, 31 de mayo de 2010

Historieta.


La vida está lleno de grandes amigos, me viene a la cabeza, Pedro y Pablo picapiedra, shrek y el azno, timón y pumba, el gordo y el flaco, los seis personajes de Friends, y muchos más.
Esto nos enseña a que todo el mundo a lo largo de su vida necesita a un buen amigo, en algún momento de su vida.

Ahora os contaré uno de esos momentos, allá va una historieta del abuelo:

-¡Silencio!, ¡he dicho que no quiero oir una voz!- La puerta de la clase interrumpió el sermón. Pablo entró silenciosamente, con la cabeza baja y una mirada de desconfianza. Le entregó una nota al profesor y este la leyó en voz baja pero clara.
-Está bien, niños, este es Pablo vuestro nuevo compañero, por favor, les ruego que le traten con respeto y lo acepten como uno más en esta clase. ¿Pablo, te gustaría presentarte?- Con la misma el joven se acercó a una mesa libre y se sentó sin decir ni una palabra.
-Pablo, esto es una falta de respeto, te ruego te levantes, y pidas disculpas. Si no te quieres presentarte no importa, ya lo harás luego.
Pablo se levantó e hizo una reverencia de cabeza. Un grupo de alumnos empezaron a tirarle pequeños papeles con una pajita, pero este les ignoró. Más niños empezaron a susurrarle insultos y ofensas pero este tampoco les contestó, simplemente ni les miró.
Ya en el patio se recogió en una esquina, donde se los matones del colegio le cogieron y empezaron a pegar una paliza. Estos deseaban que hablase pero Pablo se abstuvo de hacerlo. Otro niño que vagaba por la zona se acercó a ver lo que ocurría pero cuando pudo reconocer lo que le estaban haciendo al pobre chico gritó que un profesor se acercaba. Todos los alumnos se alejaron y lo dejaron tirado medio moribundo.
-De nada.- Dijo el niño esperando una contestación
-¿No me vas a contestar? te has dado cuenta ¿cierto?. Te he salvado de esos matones, he mentido por ti.- Siguió insistiendo con la misma contestación. Silencio.
-Gra-gracias.- Consiguió balbucear Pablo tapándose la cara con sus temblorosas manos.
-¡Vaya! Pero si el gato no te comió la lengua. Este... ¿Cómo te llamas? Yo Javier, pero aquí todos me conocen como el gafotas. Esos chicos no son de fiar. Siempre están pegando e insultando. Ten mucho cuidado. A mi también me lo sueles hacer pero... si quieres te puedo enseñar mis escondites. Allí nunca te cogerán.
-Yo-yo soy tar-ta-ta-mudo. A mi me-me pegan-siem-pre
Javier no supo que decir. Por una parte sintió lástima, pero por otra envidia. Lástima de su pobre dificultad al hablar y envidia por ser tan valiente.

¿Sabes cómo continua la historia?
Pues Pablo y Javier se hicieron grandes amigos. Ya nadie los pegaba. Se solían esconder en los huecos que Javi anteriormente había encontrado.
Con el paso de los meses Pablo se fue aceptando a sí mismo. Nunca más su autoestima fue pisoteda por los suelos. Javi era su apoyo ante esta dificultad. Era su bastón para llegar a la felicidad. Era su amigo. El le ayudó a dejar de tartamudear.
Gracias a Javier conoció el significado de la palabra amigo. Una palabra que todos nombramos diariamente pero ni la mitad sabemos lo que es. ¿Sabes tú que significa?

Historia real pero con nombres y problema (el del tartamudeo) ficticios.









Amigos, ¿para qué si no?


Muy poca gente conoce realmente el verdadero valor de la amistad. Cualquier persona que si lo haya hecho te dirá que es una sensación magnífica. Una verdadera amistad se define como aquella en la que dos amigos son solo uno. Dos buenos amigos son aquellos que se aceptan tal y como son, que se conocen, que se cuentan tanto las alegrías como las penas, que se ríen y lloran juntos...

Un buen amigo es aquel que no te deja solo nunca, aquel que cuando todo te va mal o cuando todos te dejan de lado, sabes que pase lo que pase, él estará ahí siempre.

A la familia no la escoges, tampoco eliges de quien enamorarte, pero si puedes elegir a tus amistades; supongo que ese es el auténtico valor de tener buenos amigos, que los has elegido tú.
Algún sabio dijo una vez que aquel que pueda con los dedos de una mano a sus amigos es afortunado, ¡por algo será! ¿Verdad?

Todo el mundo debería tener una amigo, es verdaderamente importante tener amigos y mejor todavía tener un amigo más íntimo que los demás. Todo el mundo debería tener amigos, ¡debería ser un derecho!
Pero, ¡atención! La amistad no es fácil, hay que luchar, y no todo en ella es bueno, habrá momentos malos.

La amistad es como una caja de sorpresas, nunca sabes lo que va a pasar, pero suele ser bueno.
Cuenta siempre con tus amigos, porque... amigos, ¿para qué si no? Esa es una de las claves para sobrevivir en este mundo, tener buenos amigos.

miércoles, 21 de abril de 2010

De una vez por todas.



La droga. Esa gran enemiga de la humanidad. Por culpa de la droga miles de personas mueren en nuestro mundo a la cada día.




La droga es una de las mejores cosas que el hombre ha descubierto, me refiero a la droga como medio medicinal, gracias a ella vive mucha gente. Pero, como siempre, el hombre no sabe aprovechar y respetar lo que tiene, a si que lo usa mal. Y ese es el caso de la droga, y no me refiero solo a lo típico: jeringuillas, pastilla y hierbas, sino que me refiero, también, a la nicotina, al alcohol y demás drogas permitidas. No digo que no bebamos, pero si que lo hagamos con moderación. Y de la nicotina mejor no hablo, porque es un tema muy delicado e importante que prefiero hablarlo en otra entrada.

¿Qué está pasando actualmente? Pues fácil, el mundo de la droga es cada vez más grande y más poderoso, y por lo tanto más adictivo. Cada vez son más los jóvenes irresponsables que se meten en el mundo de la droga sin conocer, o aún así, sus consecuencias. Y lo hacen, esto es lo más fuerte, sin importarles sus seres queridos, ya que la droga no sólo hace daño al individuo que las toma, sino que también a su familia, amigos, conocidos. Estas personas son egoístas, deberían pensar en sus seres queridos.

¿Qué debemos hacer? Pues evitar esa venta ilegal, enseñar a los jóvenes, yo entre ellos, las consecuencias, y sobre todo darnos cuenta de que la droga... simplemente... ¡hace daño!

Tenemos que darnos cuenta de que cuando un humano esta bajo el vicio de una droga, legal o ilegal, no es humano. El humano se caracteriza por su libertad, y cuando tienes un vicio que no te deja ser libre, no eres humano, ya que... ¡no tienes libertad! Aprendamos a decir que NO de una vez por todas, por el bien de todos. ¡Qué fantástico sería un mundo sin vicios, sin drogas! ¿Verdad?

lunes, 12 de abril de 2010

¡HAGAMONOS UN FAVOR!


La verdad. Una palabra sencilla de seis letras, pero seguramente uno de los términos más difíciles que existan. ¿Qué es? ¿Se ha de decir siempre? ¿Quién miente y quién no?

Desde pequeños nos enseñan ha decir la verdad: "Siempre hay que decir la verdad niños" nos repetían nuestros padres una y otra vez. Cuando crecemos nos damos cuenta de que incluso los adultos mienten, suelen mentir más que los niños la verdad, así que me pregunto si la verdad hay que decirla obligatoriamente, y también me pregunto qué es eso de la sinceridad.

Desde mi punto de vista siempre habría que decir la verdad, aunque la mayoría de las veces duela. Porque díganme, ¿qué clase de vida llevaríamos si evitásemos oír o decir la verdad? ¡No me lo quiero ni imaginar! Aunque, y esto es importante, decir la verdad no significa que siempre hay que decir lo primero que se te venga a la cabeza, eso causa grandes problemas.

La sinceridad es tan importante en nuestras vidas hasta el punto de que es uno de los pilares del matrimonio, de la amistad, del noviazgo, del amor que existe entre la familia, etc.

La sinceridad es el valor que hay que tener para decir la verdad aunque cueste, y también es la humildad de reconocerla. Una persona que haga estas dos cosas se puede decir que es una total y auténtica persona sincera. La sinceridad es una virtud hay que respetar y cuidar.

Así que señores y señoras, ¿por qué no nos hacemos un favor entre todos y respetamos más este tema de la verdad? Animo a todos, empezando por mí, a decir la verdad. Hagámoslo y ayudemos a crear un mundo mejor, en cierto manera.